Jardín central lleno de plantas, ubicación cercana a la plaza, decoración interesante.

Requiere una renovación urgente en colchones y almohadas, los olores de humedad no hacen agradable la estancia, el espacio de las habitaciones es sumamente reducido y no ayuda a la comodidad.

Un encantador refugio colonial

El ambiente acogedor del hotel despertaba cada mañana con el aroma del café de Chiapas y la amabilidad del personal anticipando nuestras necesidades. Cada día probamos delicias en el desayuno, desde chilaquiles hasta exquisitos tamales.

Sin embargo, mi habitación era un poco estrecha y la configuración de las ventanas reducía la luz natural, lo que la hacía algo oscura. me hubiera gustado tener más privacidad, ya que las paredes eran algo delgadas.

a Ubicación perfecta
b Patio encantador

a Colchones muy viejos
b Habitación estrecha

El hotel cuenta con un hermoso jardín lleno de plantas.

Desafortunadamente, la habitación olía a humedad, lo cual hizo la experiencia bastante incómoda. Además, los colchones estaban tan viejos que parecían de otra época, lo que afectó seriamente mi descanso. La falta de mantenimiento evidente en las instalaciones también fue un gran problema que me dejó decepcionado.

No cambiaron colchones ni almohadas.

me encantaría decir que disfruté mi estancia, pero las habitaciones olían a humedad, y cuentan con colchones tan viejos que seguramente estaban en la lista del museo de antigüedades. esperaba un upgrade por mis molestias, pero solo me ofrecieron más incomodidad. casi dejo una buena reseña, pero no pude. sinceramente, una decepción total.

Ubicación muy buena, a dos pasos de la plaza principal. Personal súper atento, siempre listos para ayudar. La comida riquísima, sobre todo las margaritas. Solo un pelito incómodo la habitación, un poco estrecha, pero todo lo demás compensa.

El restaurante es realmente bueno, con deliciosos platillos y una buena atención. Las habitaciones son luminosas y cuentan con televisor de pantalla plana y Wi-Fi gratuito, lo que hizo nuestra estancia más placentera. Además, el personal es muy amable y se empeña en hacerte sentir cómodo.

Las habitaciones son un poco estrechas.

Un lugar acogedor

El hotel es muy lindo y acogedor. Me encantó disfrutar del café en el jardín, era un buen lugar para relajarse. La atención del personal fue de lo mejor, siempre sonriendo y dispuestos a ayudar. Lo único que no me gustó fue que la habitación era un poco ruidosa por la calle. Pero en general, una experiencia agradable.

la posada el paraíso es un lugar super lindo, el ambiente del patio es perfecto pa relajarse y disfrutar de un buen café. el personal es muy amable, siempre listos pa ayudar y la comida del restaurante está de 10. el desayuno con chilaquiles es un must, más rico q cualquier cosa. la ubicación es genial, a pasitos del centro.

la habitación era un poco estrecha y olía a humedad, lo que no me dejó del todo cómodo.

La Posada El Paraíso se siente como un pequeño paraíso en el corazón de San Cristóbal. Cada mañana, me despertaba con el aroma del café de Chiapas que me llevó a un estado de felicidad pura. El restaurante ofrecía un desayuno buffet lleno de delicias, como chilaquiles que eran más sabrosos que cualquier canción de amor, y una terraza perfecta para disfrutar del cafeína matutina mientras contemplaba las flores del encantador patio central.

Habitaciones algo estrechas

una experiencia inolvidable en la posada el paraíso gracias a su encantador jardín y delicioso desayuno que cautiva los sentidos

Qué maravilla de lugar! La Posada El Paraíso tiene un ambiente increíble y su jardín es sencillamente hermoso. El desayuno fue un festín para el paladar, ¡cada bocado era un deleite! Y la atención del personal, realmente excepcional, siempre atentos a que todo estuviera perfecto. Una experiencia que dejó huella en nuestros corazones.

Un lugar ideal para una cita en San Cristóbal de Las Casas con una buenísima relación calidad precio. El patio central lleno de plantas es hermoso y hace la estancia más agradable. Si buscas descanso, elige habitaciones que no den a la calle para evitar el ruido.